Dietas para bajar de Peso


La mayoría de las personas busca una solución segura para bajar de peso y quieren encontrar en las dietas dicha solución.

Existen una infinidad de dietas que andan circulando por todos los medios. Muchas veces planteadas con responsabilidad y bajo criterio profesional, pero otras no.

A continuación vamos a presentar algunos puntos importantes a la hora de saber que alimentos nos benefician y cuáles no.

Una buena dieta debe aportar los tres nutrientes fundamentales al organismo. Hidratos de carbono o glúcidos, Lípidos y Proteínas. Sin embargo, cuando decimos hidratos de carbono no nos referimos a los de mala calidad como los que encontramos en los dulces procesados, tortas, caramelos, etc. Nos referimos a los que se encuentran en las frutas y verduras y los hidratos de carbono complejos que hacen que la glucosa se libere lentamente evitando así las escaladas bruscas de la insulina, proceso que trae malas consecuencias. Ejemplos de estos son la avena, el pan integral, arroz integral y legumbres entre otros. Las fibras también están dentro de los glúcidos, las cuales traen grandes beneficios ya que limpian los intestinos aumentando el tránsito de los alimentos y evitando que se acumulen sustancias nocivas.

Algunas dietas se basan en quitar prácticamente todos los hidratos de carbono y aumentar el porcentaje de proteínas, lo cual se ha demostrado que trae trastornos como la aparición de cetosis que es la consecuencia de la acidez de la sangre.

Las proteínas deben estar en un porcentaje algo menor que el de los glúcidos, entre un 20 a 30 % aprox. Alimentos ricos en proteínas son las carnes magras (con poca o casi nada de grasas saturadas), los huevos, la avena y ciertos quesos.

Las grasas o lípidos deben oscilar entre un 15 a un 20 % o algo más aprox. Sin embargo al igual que los glúcidos debemos hacer hincapié en que tipo de grasas debemos consumir. Las grasas mono y poliinsaturadas son enormemente más beneficiosas que las saturadas. Se encuentran en los aceites vegetales como el de oliva y los pescados. Estos alimentos reducen el nivel de LDL (Colesterol malo) y aumentan las HDL (Colesterol bueno). Ayudan de esta manera a proteger mejor nuestras arterias.

Estos son algunos puntos básicos para tener una idea de que debemos consumir. Pero lo ideal es que un profesional ajuste la dieta a la medida del paciente. No todas las dietas son buenas para todos. Las personas tienen distintos metabolismos y estados fisiológicos, por esto es importante conocerlo para lograr los mejores resultados. Las dietas para bajar de peso deben mantener el equilibrio nutricional en el paciente.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *